Libreta de oración
¿Alguna vez has estado preocupado por muchos asuntos en tu vida? ¿Te has sentido agobiado por los grandes problemas? ¿Has sentido que incluso pequeñas preocupaciones te quitan la paz? Todos hemos pasado por momentos así y se que muchos se nosotros lo hace en estos momentos. Bueno, mi meta para este blog es no solo publicar reflexiones y/o prédicas, sino también proveerles a ustedes pequeños consejos que pueden ayudarlos en su vida cristiana.
Un diminuto y simple, pero buen consejo, es tener una libreta de oraciones ¿Qué es esto? Pues esto es una pequeña libreta de bolsillo donde apuntes cada una de tus preocupaciones. Puedes escribir peticiones especiales, tanto grandes como pequeñas cosas, problemas que te estén ocurriendo y cualquier pensamiento y situación que quieras entregarle al Señor. Cada vez que Él te responda alguna, táchala o hazle alguna marca.
Esta libreta de oración te ayudará a mantener tu mente un poco más organizada y no solo eso. Con el pasar del tiempo, revisa tu libreta y te llevarás algunas sorpresas. Te darás cuenta que hubo situaciones por las cuales te preocupabas tanto, pero que Dios luego obró en ellas. Esto te hará saber, con el tiempo, que no debes preocuparte mucho por todo, ya que Él sabe lo que necesitas y obra según su tiempo perfecto. Entonces ¡Adelante! Busca tu libreta de oraciones y a escribir.
Por ultimo les dejo estos versículos bíblicos para que reflexionen en ellos y tengan presente que aunque nos preocupemos, Dios tiene el cuidado de lo que necesitamos.
El afán y la ansiedad (Mateo 6:25-34)
25 Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
26 Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas?
27 ¿Y quién de vosotros podrá, por mucho que se afane, añadir a su estatura un codo?
28 Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo, cómo crecen: no trabajan ni hilan;
29 pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos.
30 Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?
31 No os afanéis, pues, diciendo: ¿Qué comeremos, o qué beberemos, o qué vestiremos?
32 Porque los gentiles buscan todas estas cosas; pero vuestro Padre celestial sabe que tenéis necesidad de todas estas cosas.
33 Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.
34 Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal.