¡Él pelea por ti!

        "Muchos son, Señor, mis enemigos; muchos son los que se me oponen, y muchos los que de mí aseguran: 'Dios no lo salvará'. Pero tú, Señor eres mi gloria; ¡Tú mantienes en alto mi cabeza! Clamo al Señor a voz en cuello, y desde su monte santo Él me responde." Salmos 3:1-4

        ¿Es acaso tu guerra muy fuerte? ¿Sientes que tus enemigos te rodean para destruirte? ¡No temas!¿Ves la imagen del juego de ajedrez?  ¡Así es la vida real!

        Muchas veces te sentirás rodeado por tus enemigos y creerás que no hay salvación para ti. Pero ellos huirán porque verán la gloria de Dios sobre tu vida.

       ¡Adelante! ¡Pelea la batalla y no tengas miedo! 

                        ¿O acaso no recuerdas?: 

        Las batallas más fuertes se pelean de rodillas.